Todo
estaba listo para la gran grabación nocturna que haríamos por las calles
peligrosas del centro de Lima, aunque seis de nosotros apenas conocían las
calles del centro de noche, solo yo podía conducirlos por los lugares donde no
nos robarían la cámara y todas nuestras cosas, aunque hubiese preferido la
opción de Ángelo de grabar por la universidad a los vagabundos, o en el mismo
Kennedy a los gatos como propuso Maritza, pero no, gracias a Jorge acabamos
aquí por un buen promedio de 20.
Quien
llegó último fue… yo misma, debido a problemas del recojo de mi hermana de una
actuación en su colegio, finalmente pudimos reunirnos todos en el equipo de
trabajo, Tamara trajo su mini cámara profesional que si podríamos usar para
grabar a las señoritas de la noche en plena acción, pero que tendríamos que
grabar con mucho cuidado, y para tener un buen ángulo, usaríamos a Jorge para
nuestros planecillos.
Le
dijimos a Jorge que fuese nuestro interlocutor y sin levantar sospechas grabase
cuanto cobraban esas chicas, como trabajan y que trabajos hacen por tal
cantidad de dinero, cosa extraña que sabía Maritza de maravilla, mientras
utilizábamos un pequeño micrófono puesto en la camisa de Jorge, gracias a
Daysi, quien por suerte lo trajo como un extra para la grabación; Milagros
apuntaba las preguntas que podría hacerles y yo miraba si estaban bien, aunque
seguía sin caerme tan bien esa chica.
No
es porque era bonita o tenía el cabello bien cuidado y arreglado, tampoco que
fuese largo, para nada eso me molestaba, solo era un pequeño detalle, que era
que… ¡Parecía que todo lo conocía! Sus constantes participaciones en todas las
clases, siempre siendo tan aplicada para los estudiantes de la tarde… ¡Ya me
cansaba de ver ese espectáculo de sabiduría! Aunque yo contestase algo, al final
el castigo iba para mí, pues de tanto distraerme gracias a ella mis notas
estaban decayendo, ¡No podía dejar que este trabajo fuese mi perdición! ¡Debo
de sacar la más alta nota! ¡Así tenga que ir yo misma hasta la habitación de un
hostal para saber sobre los prostitutos!
Nos
preparamos, nos vestimos sutilmente y de colores oscuros, para ir como un solo
grupo hacia esas calles, comenzando por la avenida Bolivia, e ir bajando hasta
la antigua sede de lo que era la famosa discoteca “Cinco Avenidas”, donde se
decía que escolares iban a contraer enfermedades venéreas y contraías sida de
la noche a la mañana por culpa de prostitutas, por allí empezaríamos nuestra
grabación. Gracias a las pocas clases mal explicadas del uso de cámara, pudimos
grabar en la noche ajustándolo con un balance de blancos para poder hacerlo de
manera profesional.
Jorge
se presentó ante la cámara, quien era manejada por Tamara, y era guiada por el
pequeño script que hizo angeló un día antes, y como siempre, contando chistes
sobre Jorge, quien parecía tener un aura de santo o algo parecido, y Milagros
hablándome sobre por cuales calles ir, suponiendo donde habrían más
prostitutas, faltando el respeto a mi conocimiento de estas calles y que podía
hacerlo mi misma, guiarlos era mi chamba, sino podía con eso, entonces no
podría con todo lo que dejasen a futuro en las siguientes clases de tantos
cursos que tendremos en el futuro.
Mientras
les decía que estaba bien, y se veían geniales grabando como profesionales sin
ser todavía las nueve de la noche, decidí hacer uso de mi plan planeado con
lujos desde la noche anterior, era momento de hacerlo. Mi plan consistía en
visitar las calles aledañas a la discoteca, para luego pasar por algunas
discotecas solapas que exhibían tragos a homosexuales y travestis en las
noches, pasar por allí, hacer tomar únicas de ellas y ellos, para luego ejercer
mi labor de periodista en proceso y lograr una entrevista, si fuese posible en
el mayor éxito, que me invitasen a un hostal para grabarlo… aunque no tenía
idea de cómo saldría después, la cosa era arriesgarse, de verdad quería superar
a Milagros ¡Tengo que hacerlo!
Sin
saberlo o sentir una rara entidad dando vueltas, Kim era observada desde lejos…
- - Sabes que nada me costaría eliminarla y punto Bah… - dijo un joven francotirador apuntando su arma hacia la cabeza de Kim
- - Sabes que lo sé, pero primero tengo que aparecer rescatándola, porque si voy como me ves, de linda y feliz hablando de una nueva idea política, se aburrirá, hasta yo me aburro de solo decirlo
- - Vaya eso si es que motivador, entonces… ¿Qué harás?
- - Ya lo tengo preparado, será una sorpresa, a ver si Kim puede salir de esa situación, mis palabras son el chisme del mundo
Tome
cartas en el asunto y puse en marcha mi plan, le dije a Daysi que iría a
comprar unos chicles en la tienda, a la vuelta de la calle, me dijo que tuviese
cuidado porque estas horas era las que adoraban los choros para salir a robar,
le contesté que no se preocupase, después de todo conocía esos lugares, aunque
no tanto, pero era mi momento de brillar, les dije a todos que volvería en
minutos, aunque noté una mirada rara de Milagros, bueno, no me importaba.
Al
ver por ambos lados de la calle, pude ver de lejos lo que parecía ser una chica
trabajando sexualmente, aunque por la cara, y esa manzana de edén, sin duda,
era un hombre con exuberantes muestras de piel. Tomé la valentía de acercarme a
ella o él para preguntar, a lo que, gracias a Dios, pude hacerlo sin
dificultades, el tipo me concedió sin problemas una breve entrevista, de cuanto
cobraba por cliente y a donde lo llevaban para hacer uso de su “trabajo
especial”, tome nota de todo e incluso grabe con mi celular algunas partes que
me costaba escribir, pues esas palabras con P y V no era de mi vocabulario
normal.
Me
indicó donde podía tomar registros y notas profundamente, en una calle en
especial cerca de la plaza Dos de Mayo, lugar para varios taxistas y jóvenes en
busca de acción sin saber delimitar que era ser hombre o mujer. No podía tomar
esa decisión pues dejaría a mi grupo lejos de mis palabras de ir a la tienda;
ya no era tiempo de seguir en solitario… ¡Era momento de arriesgarme en todo!
Para
mi mala suerte, un grupo de pirañas se acercaban detrás de mí, hasta que
finalmente me rodearon, eran siete pirañitas contra una chica que apenas podía
pensar… mierda… ¿Qué hago? ¿Por qué me aleje de todos? Mi estupidez de pensar
que podía hacerlo todo… mierda…. ¡MIERDA! ¿Qué HAGO? ¡AYUDENME!
- - Bien, es momento de aparecer, matar a esos tipos y rescatarla, nos volveremos amigas por siempre y le induciré a unirse a la legión
- - ¿Inducir? Que formalidad bah – dijo Jair con aburrimiento
- - ¡No me molestes! Ahora… ¿Qué? ¿Quién es ella?
Milagros
apareció detrás de ellos, primero diciéndoles amablemente que se alejaran de mí,
porque si no su castigo sería peor para ellos; ellos solo rieron de sus
palabras, y me dieron un golpe en la cabeza que me hizo caer durante unos
segundos, pero pude ver fijamente como uno de esos fue corriendo hacia Milagros
para atacarla, cosa que respondió haciéndole caer con su pie, luego sujetarlo
del brazo derecho y enviarlo al muro ¿Qué diablos?
- - Se los advierto por segunda vez, aléjense de ella o no respondo de mis actos, Kim corre hacia nuestro grupo y vayan al Real Plaza, yo los veré allí en unos minutos
- - Pero… Milagros tenemos que correr o llamar a la policía ¡No te hagas la heroína!
- - ¿Y que acabas de hacer hace unos instantes al alejarte de nosotros? Pensé que éramos amigos y podíamos hacer este trabajo juntos, como un equipo, pero creo que me equivoqué
- - Yo… lo siento, Milagros…
- - No importa… ¡Corre ahora! Estudie Karate y tengo las de ganar, ¡Huyan ahora!
- - Lo siento… confiaré en ti totalmente, ¡gracias Milagros!
- - Muy bien ladrones de pacotilla, verán mi poder… ¡El poder de la gravitación!
Los
ladrones se dirigieron hacia ella, usando cuchillos cortos, y uno con un arma
tratando de apuntar al pecho de Milagros, que no resultó bien pues, por un
extraño hecho, ella estaba haciendo flotar varias bolsas de basura a su
alrededor, que lanzo con furia hacia lo maleantes, derrumbándolos en segundos
con cada costalazo de basura que impactaba en sus feos rostros. Utilizando sus
manos para manipulas los objetos, controló con mucho sudor un poste de luz, que
lo hizo tumbar para caer encima del tipo que disparaba, ¡Un poste de luz!
Milagros
salió ilesa de esa pequeña batalla, sabiendo que sus poderes no fueron vistos
por nadie, se aseguró de ver por toda la calle, y una vez creyendo estar
segura, fue en dirección hacia sus amigos, pero con el corazón acelerado, pues
utilizar ese poder que recientemente habría descubierto la agotó totalmente,
todavía no manejaba al 100 % ese nuevo poder, pero no podía ocultarlo por
siempre a los demás, pensaría en una coartada para poder explicar que acababa
de pasar, pero por ahora, se preocuparía en Kim, quien de verdad… estaba
sintiendo empatía.
- - Vaya… que hemos descubierto… parece que hay alguien igual a nosotros bah – dijo sonriente Jair
- - Demonios quería actuar, pero creo que nos equivocamos de chica, Kim es una inútil, Milagros… creo que será mi nueva “amiga”
0 comentarios:
Publicar un comentario