Compártenos en:

sábado, 21 de enero de 2017

Jerouu fue primero en ir a la carga, usando su bastón gritó con entusiasmo la nueva técnica que aprendió en las viejas ruinas místicas de Machu Picchu, ¡Pachacs! Pero fue retenido por una sola mano del general, quien, al verlo aproximarse, utilizó su otro brazo para impactarle en el rostro, cosa que fue evitado por una gran ráfaga de aire proveniente de la izquierda gracias a Alexina.



Fue golpeado en la cabeza gracias al impacto de rayos de Sylvana, quien con toda su fuerza y electricidad le propinó un duro golpe en la cabeza, que lo desconcentró por unos segundos, segundos aprovechados por la increíble fuerza de los puños gigantes de Luis, logrando enviarlo a la plaza 2 de Mayo, destruyendo el viejo monumento en el centro. No bastando con eso, el general se levantó y lanzo varias piedras gigantes del suelo hacia sus oponentes, siendo destruidas por las espaldas de piedra de los antiguos héroes de guerra.

Antiguos soldados de piedra y mármol lo atacaron con total impunidad por la izquierda y derecha, unos ángeles tras otro vinieron a atacarlo, incluso el avión gigante pilotado por Milady disparó balas de piedra a su objetivo, solo para servir de distracción para otro gigantesco golpe de Luna con su armadura cadavérica fantasmal. Lo sujetó con ambos brazos gigantes y lo lanzo con ira al suelo, destrozando gran parte de la antigua carretera del “Metropolitano”.

Y para finalizar la gran cantidad de golpes, aparecieron rocas gigantes cayendo del cielo gracias al poder de Jhon, que impactaron profundamente en el cuerpo del general, para ser cerrado por la visión tecnológica de Diego quien lo utilizó para enviar un autobús hacia él, hackeando la seguridad del Metropolitano para tirarle encima el gran peso, acabando con un desconcertante cruce de espadas japonesas de Kim.

Todos retrocedieron luego de esa gran cantidad de golpes perpetrados hacia su enemigo, quien yacía sin moverse en la pista, hasta que escucharon un latido palpitante, todos escucharon el mismo latido…
  • -       Hahaha – vaciló el general - ¿Es todo lo que tienen?

Se levantó como si nada le hubiese pasado, realmente este sujeto daba miedo con su fortalecido cuerpo y sus pantalones formales, se tocó el cabello y con voz firme dijo:

  • -       Lamento informarles que su daño en equipo solo fue… una caricia de gato, ahora les enseñaré que es realmente un poder supremo… ¡CONQUISTADOR: ¡FRANCISCO PIZARRO!

Un espiral de aire y fuego lo cubrió totalmente, envolviéndolo en oscuridad con rayos parpadeantes de luz que solo se podían observar en el amanecer, esos espirales cesaron de inmediato, saliendo de ellos un fortalecido general. Recubierto con una armadura de oro, brazos tonificados de oro, piernas cubiertas de la armadura, el caso tradicional de la realeza española, salvo por las marcas distintivas de la legión, y lo que parecían ser… alas doradas saliendo de su espalda, un feroz enemigo acababa de nacer.

  • -       ¿Y qué tal? ¿Les sorprende mi nueva apariencia Soulos? Hasta yo me sorprendo… ¡Comencemos la segunda batalla, mierdillas!

El general se dirigió hacia la posición de Jerouu, y con una patada poderosa, fue capaz de enviarlo por toda la carretera del metropolitano hasta la estación España. Luego con ambos brazos, tomó por sorpresa a Alexina y a Sylvana de los pies para enviarlas al suelo, Luis lo sujetó por la espalda, pero le rompió un brazo al soltarse, lo agarró y lo lanzo hacia Jhon y Diego. Kim quiso intervenir usando su tachi para cortarlo en dos, pero fue incapaz de hacerlo por la velocidad del general, que la golpeó profundamente en el estómago con una patada, luego la sujetó por la cabeza y la mandó a volar hacia Luna, que apenas pudo agarrarla con su poder, pero al ver hacia el cielo, el general cayó de rodillas causando una fuerte explosión, dejando a ambas en el suelo. Levantó la mirada hacia Milady, pero en su camino se interpusieron las estatuas, quienes intentaron detener su avance.

  • -       Mierda… ese golpe si dolió – dijo Jerouu al levantarse – sus poderes han aumentado, pero no puedo darme por vencido… debo seguir enfrentándome…
  • -       ¿A mí? – el general apareció frente a él
  • -       ¡Bastardo!

Se levantó rápidamente e intentó golpearlo en el rostro, pero fue detenido por una mano del general, quien quiso golpearlo en el estómago, cosa que logro evitarlo, usando su bastón para atacarlo desde el aire con sus ráfagas de energía, cosa que fue ignorado por el general, cansado de tantas ráfagas, lo tomó de la cabeza y lo arrojó a la estación, destrozando todos los vitrales con fuertes sacudidas del cuerpo de Jerouu.

  • -       Dime, Jerouu, ¿Alguna vez te has enfrentando a un enemigo real? – lo saltó rumbo a la estación central, destruyendo parte del concreto de muros y pequeños puentes, hasta destruir parte de la estación central - ¿Alguna vez has peleado en tu puta vida? ¿Alguna vez matado a alguien? Porque puede que te hayan enseñado a defenderte, pero si no te han enseñado a golpear, ni a matar a tus oponentes, de nada te sirve utilizar el Ium
  • -       ¿Qué dices? – se levantó sacudiendo la cabeza luego de tantos golpes

Jerouu se aproximó hacia su enemigo para atacarlo nuevamente con los pachacs, pero fue evitado por un aplauso de su enemigo, un aplauso tan fuerte que los deshizo en segundos, para ser sorprendido por un puñetazo de su contrincante, y luego un patadón en el rostro. El general sonrió y devolvió los golpes, hacia el rostro y parte del brazo. Jerouu no se contuvo y lo atacó otra vez con su bastón directo al cuerpo.

Retrocedió unos cuantos pasos para nuevamente atacarlo, pero fue recibido por un severo golpe que destrozó parte del concreto para aparecer desde abajo por la siguiente estación del metropolitano, la estación del estadio nacional, un gran estadio símbolo del futbol peruano, y lugar donde se desarrollaría una pronta batalla.

Ambos competidores ahora chocaban sus respectivos puños para probar quien podría continuar y quien se rendiría totalmente. Cada choque destrozaba cada cristal que reforzaba la seguridad en la estación, el general cogía diversos autos para lanzarlos hacia Jerouu, pero lograba detenerlos a tiempo y destrozarlos en el momento justo que se encontraba frente a frente, otra vez. Para ayudarlo, aparecieron de nuevo los guardianes de piedra y mármol, quienes no dudaban en seguir las ordenes de su jefa.

Milady les ordenaba seguir atacando a su enemigo, pero cada ángel que intentaba atacarlo, era destrozado por completo, hecho trizas por los puños del general, eso al menos, le dio un respiro a Jerouu, quien ya tenía parte de su armadura dañada, debido a los diversos golpes dirigidos a su cuerpo y lograba bloquear con sus brazos. Milady le dijo que retrocedieran y se reunieran todos cerca de la estación Javier Prado, usando sus poderes, todos fueron hasta esa estación, mientras el antiguo héroe, Bolognesi, era destrozado en muchas partes gracias, al poder gigantes del general, que solo vacilaba de locura.

  • -       ¿Qué mierda hacemos? Mis poderes se agotan gente – dijo Sylvana tratando de pensar en un plan
  • -       Tengo una idea – hablo Milady – pero es muy arriesgada
  • -       Toda idea vale amiga – contestó Alexina
  • -       Pues bien, escuchen todos, el poder de Luna consiste en crear una especie de armadura gigante ¿No?
  • -       Pues sí, pero… solo el torso, no puedo hacer todo un cuerpo gigante – respondió Luna temiendo ser reprendida
  • -       Tranquila, lo que diré ahora, la cuestión es que, necesitamos que formes ese gran cuerpo, y usar todos nuestros poderes fusionados
  • -       ¿Fusionados? – dijo Jerouu fascinado - ¡Excelente! Pero… espera ¿Cómo haríamos eso? ¿Es posible?
  • -       Ni una puta idea huevón – dijo Milady – pero no tenemos otra cosa
  • -       Bueno… ¡Entonces vamos equipo! ¡A ganarle a ese maricón de mierda!
  • -       Eh… amigos… lo que vayan a hacer es mejor hacerlo ahora, mis poderes no son ¡Ilimitados! ¿Lo saben no? – contestó Carlos usando los colores de los edificios contiguos para retener a su enemigo
  • -       Entonces vamos, Luna contamos contigo
  • -       ¡Lo haré lo mejor!

Con los antiguos guardianes de piedra destruidos, los poderes de Carlos y los demás a punto de colapsar, solo dependían de Luna y toda su fuerza por crear un humanoide gigante color gris, y usar los poderes de todo para crear una especie de unión entre todos los descendientes incas, si no funcionaba… ya nada funcionaría, solo esperábamos ese milagro.

Luna se concentró todo lo posible en crear una forma humanoide gigante, pero desde que sucedió lo del incendio, nunca pudo controlar a la perfección su poder, sin embargo, ya no era tiempo para pensar en temer, tenía que superar ese miedo a descontrolarse o ser controlada, para forjar su propio destino, su propio camino, fue entonces…

  • -       ¡Vamos Luna! ¡Te necesitamos! – hablo Jerouu peleando contra el general - ¡Solo tú nos puede ayudar! ¡CONFIAMOS EN TI LUNA! ¡PORQUE ERES NUESTRA AMIGA, CARAJO!


Esas palabras… esos sentimientos, sus nuevos amigos… tomó su decisión… y en ese instante, una gran forma humanoide apareció, la gran figura ancestral de los Apus estaba de vuelta, esta vez, en una forma gigante, más grande que el edificio principal de Lima.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Soulos y Legionarios

Soulos

Los Soulos Son quienes descienden de los antiguos incas, usan sus poderes especiales que han logrado despertar para apoyar a los demá...

Siguenos

Formulario de contacto

Datos personales

Jorge Luis Carranza Gosalvez. Con la tecnología de Blogger.

Comercial Cielo de Almas

Los Capítulos de la Semana