Capítulo 55: ““Los Catorce Incas- Armado y Sagaz”

Mayta Cápac fue un hombre de fuerza prodigiosa, tenía un extraordinario espíritu guerrero.

• -       ¿A qué se refiere con que yo soy un inútil? – dijo molesto
• -       Mírate ahora, tu pasado, sin saber quién eres realmente, puedo ver en tus ojos desesperación y temor bajo la fachada de risas y salsa – contesto el vago
• -       No… ¡mentira viejo! Es puro floro
• -       Digas lo que digas, todo es verdadero, ahora siéntate y déjame contar que realmente puedes lograr en el futuro
• -       Bueno… pero soy chistoso, ¿o no Sylvana?
• -       Yo calladita me veo más bonita – respondió sin prestarle atención

El nombre de tu antecesor en Mayta Cápac, fue reconocido como un valiente niño y un prodigio en el uso de las armas, se decía que nació al tercer mes, pero, que, gracias a su condición física y su propia voluntad, pudo crecer y convertirse en supremo Inca.

Gobernó totalmente con un vasto territorio, derroto las rebeliones que siempre ocurrían en su reino, gracias a las armas favoritas de él, las hachas y lanzas, tenía tal precisión que perforaba incluso piedras mismas, bueno, eso dicen.

• -       Bien, ¿Cuál es mi poder definitivo? ¡Dime!
• No poseía algún don especial, pero si tenía una conexión especial, incluso mágica, con el mismo océano pacifico.
• -       ¿El océano pacifico? ¿quieres decir que era un inca surfista?

No. En una de sus últimas batallas, llego a la costa del océano pacifico, cerca del puerto del Callao, al llegar, se quedó sin palabras al ver tan grandioso mar, y que lo primero que hizo fue tirarse un clavado directo al mar. Sus soldados pensaban que se había matado, pero salió del mar montando un lobo marino, ¡algo realmente extraño!

• -       ¿Un lobo marino? No… ¿de verdad? ¿fue surfista? ¿adoraba el mar? ¿pintaba?

Muchas preguntas niño, primero que todo, el surf no existía en esa época, segundo, son leyendas, no hay fotos ni nada de eso que prueben que era un lobo marino, o que al menos se haya lanzado al mar de esa manera, y tercero, no había pinturas, pero si esculturas y obras al mar hechos por el mismo.

• -       ¿El mismo?

Si, esos monumentos, son antiguas huacas que el construyo, ayudado por sus hombres, en honor al mar, y a la divinidad que creyó le daba de todo para vivir en total armonía junto al océano, gracias a la comida y al hermoso paisaje, pudo disfrutar de una muerte tranquila, y de eso, parece que tú lo heredaste.

• Tú tienes el don de utilizar los colores del mundo a tu favor, porque tienes un arma que le pertenecía al mismo Mayta.
• -       ¿Cómo? ¿pero si este porta borradores es nuevo?

No me refiero a esa cosa, sino, al modo de utilizarla, haces los mismos movimientos que el cuándo se trataba, de atacar a sus enemigos, sus mismas armas, las creas con los colores que robas de las cosas, por eso digo que te pareces a él, aparte de que amas el mar, fuente de toda vida.

• -       Oh… entiendo – por su mirada perdida, no lo entendía
• Hahaha ya lo veras por ti mismo si lo entiendes o no. Tú, donde crear cosas con los colores de la realidad, es un claro ejemplo, que puedes controlar la luz y la oscuridad también, porque de eso provienen todos los colores.
• -       Espera viejo... ¿controlar la luz y oscuridad?

No me adelantaré, porque eso lo tienes que descubrir tú mismo, saber que es unirte al mar y al sentimiento de crear cosas con los colores de la vida misma, en eso pensaba Mayta y todos sus descendientes, ahora, debes de entrenarte y controlar totalmente ese poder.

-       Vaya, puedo controlar la luz y la oscuridad a mi antojo

-       ¡No dije eso niño baboso! Pero si tienes ahora, mas fe en ti mismo y en tu poder, tal vez, puedas lograrlo

• -       ¡Hahaha! Claro… primero yo seré famosa y el controlara la luz eléctrica de Edelnor– contestó chistosamente Sylvana
• -       Oh… la niña rockera
• -       Ahora me toca a mí vago, ¿no?
• -       Supones bien, para ser una inmadura total con aire de puta
• -       ¿Qué dices viejo estúpido y sucio?

Amauro Inca Yupanqui, el hijo sagaz de Pachacútec, su personalidad cae contigo, ambos son prudentes, imperativos y muy desordenados, y claro, no saben dirigir, por eso no eres la líder, a pesar de todo eso, perteneces a este grupo.

• -       ¡Retráctate viejo!

No lo haré nunca, eso es lo que eres, y como te han sucedido las cosas, creo entender esa manera ruda de tratar las cosas y tu odio hacia los hombres, ese odio no ha dejado vivir como se debe, y en eso, has generado caminos diferentes hacia tu misma destrucción, sino fuese por tu poder, ya te hubiesen matado.

• -       ¡Cállate vagabundo apestoso!

Dime todo lo que quieras, pero esa actitud tuya será la causante de tu propia destrucción y desolación, igual lo que le ocurrió a Amauro, su nombre significaba sagacidad, era rápido en tomar decisiones, pero no las correctas, su pronta caída y rebelión por parte de su propio pueblo, le costó la vida totalmente y casi hunde al imperio que formo su padre, en todo te pareces a él, salvo por una cosa…

• -       Mira… si quieres humillarme frente a mis amigos, será mejor que me largue de aquí, sin ofender tu hogar Jerouu
• -       No… hay problema, pero…
• -       Al menos, ¿déjame terminar no?
• -       Está bien…

Lo que iba a decir es que, el no murió a temprana edad, por una cosa, la amistad que tuvo con sus amigos cercanos, y en especial, a su hermano menor, Túpac Yupanqui, futuro gobernador del imperio. Él lo ayudo bastante para salir adelante, ambos eran el uno para el otro, se complementaban, siempre peleaban juntos, pero al momento de tomar decisiones importantes, este dejaba a su hermano menor de lado, por temor a que lo enviasen a la batalla y muriera por culpa de Amaru.

• -       ¿Amistad? ¿Amor?... eso no va conmigo

Dices eso y tienes enamorado, al igual que tú, también te sentiste protegida y feliz cuando Jerouu te salvo de ese casi accidente, y decidió escucharte y apoyarte en tus ideas, también el ofrecerte unirte a ese grupo de jóvenes con la idea de ayudar al Perú. Jerouu es como un hermano mayor para ti, aunque tú seas mayor en edad, el té supera en cuestión de habilidades y tomar decisiones, a pesar de que sea aún muy inmaduro, sus ideas han florecido en ti una forma de pensar nueva, a confiar en la gente, y en especial, en los hombres, que una vez dijiste nunca volver a verlos a la cara.

• -       Bueno… es cierto, es verdad que ahora soy menos agresiva, y desde que deje la banda que forme, bueno, mis poderes ya no… ya no es necesario que use mi guitarra, sino ahora creo sentir que, estoy generando mi propia electricidad…

-       Exacto, aun te falta mucho por mejorar, pero reconocer esto es un principio, tú ya no eres la chica problemática y que detesta a los hombres, ahora eres la chica que desea proteger a los demás, como paso en el rescate

• -       Yo… no rescate a Luna
• -       No, pero ayudaste en el rescate, y fuiste quien más se preocupó, así me conto mi ahijado, ¿no Jerouu?
• -       Hahaha… - rio con preocupación
• -       ¡Jerouu!
• -       No te molestes con él, haha, es un bonito sentimiento, e importante para tu futuro como dueña de los relámpagos en toda Sudamérica
• -       ¿dueña de los relámpagos en Sudamérica?
• -       Si… Amaru descubrió parte de la selva y el rio Madre de Dios, pero también vio fuertes rayos que, intereso al muchacho y los observo durante un tiempo, al igual que la corriente del rio, pensó en un mundo diferente donde acababa el rio, un mundo sin igual, un reino de dioses poderosos

Aunque Amaru fue olvidado por las siguientes generaciones de tahuanintisuyanos, nunca se dejó de lado el monumento y su descubrimiento de otras tribus, nunca los ataco, pero los considero seres fascinantes. El poder que tienes de, controlar la electricidad, es minúsculo a lo que podrás hacer mañana, como es, el generar rayos por ti misma, rayos eléctricos.

• -       ¡Rayos eléctricos! ¿de verdad? – su actitud cambio totalmente

Si, muchas cosas podrás hacer, tu dios, aún desconocido te bendijo con ese don, y ese don, es el que unirá a los peruanos contra el mal del gobierno.

• -       Si! ¡Es de putamadre!

Exacto, ahora… vamos contigo Luis, el niño prodigio y el tímido del grupo.