Capítulo 124: “Inca Roca Borgues, ¡En llamas!”

El ex general entraba con toda su fuerza, a pesar de sus años, todavía mantenía ese espíritu tan vigoroso como en sus años de juventud, mostrando toda la fuerza necesaria que entregaba en cada misión cuando era militar, golpe tras golpe, bala por bala, seguía su camino para abrirle paso a su sobrino, quien no tenía idea de que era esperado por una temible chica de fuego en plena plaza de armas de la ciudad capital de Tacna.

• -       Sigue sobrino, ¡Yo me encargo de estos bastardos traidores!
• -       Está bien tío, cuídate
• -       Hahaha tú igual, y digan lo que digan los demás, siempre serás el orgullo de toda la familia Borgues, sigue tú camino hijo
• -       Bien

El ex general se quedó luchando contra las hordas de la legión del cóndor, quienes, al ver sus expresiones en sus rostros cuando disparaban hacia el cuerpo del ex general que parecía estar hecho de metal, se podía observar temor, frustración y un miedo tan grande que no era superior al de los pobladores, que, al parecer, casi nadie de ellos se sentía augusto con lucha contra sus mismos hermanos.

Una cosa era pelear contra delincuentes, violadores o narcos, pero otra era el luchar por obligación y detener a manifestantes que no querían un golpe de estado, ellos sabían bien que lo hacían, sin embargo, el poder junto al dinero que les pagaban por cumplir órdenes pues, chocaba contra su moral y lo que ellos pensaban que era bueno para todos, después de todo; son policías que combaten el crimen, no criminales de estado.

Ambos se encontraron frente a frente, separados por unos cuantos árboles frondosos que se movían de lado a lado por el viento que retumbaba en toda la capital, ambos enemigos se miraban esperando un movimiento sospechoso y atacar con todas sus ganas. Una era una legionaria ferviente a su causa que ya se creía dueña de todo Tacna, el otro era un humilde, débil y temeroso Soulo que quería no pelear e huir para salvarse.

• -       Haré la presentación respectiva, mi nombre es Noelia y soy la capitana de la división tacneña policial y del ejército. Vengo en nombre de la legión a reclamar este lugar y acabar con su único defensor a la vista, ahora preséntate – en todo momento de su discurso, con su espada desenvainada levantada
• -       …
• -       ¿Qué pasa? ¿Eres tímido? Descuida, de todas formas, morirás en unos cuantos minutos, mientras…
• -       Antes de presentarme – interrumpió su discurso - ¿Por qué haces esto? ¿Qué ganas haciendo esto? ¿Realmente está bien actuar de esta forma?
• -       ¿Qué dices? Por supuesto, soy miembro de la legión por muchos años, desde que nací siempre he tenido eso en mente. Mi misión en esta vida fue la de servir a mi país ante toda circunstancia
• -       ¿Servir a tu país? ¿Crees que matar a inocentes es realmente una manera de servir? Yo creo que no, donde nací siempre me enseñaron a respetar la vida, las decisiones de otras personas y a perdonar todo. Mi nombre es Luis Borgues
• -       ¿Borgues? Ese apellido me suena… pero, de todas formas, a mí me gusta mi misión, me gusta pertenecer al grupo de los vencedores, los únicos verdaderos portadores de la verdad. Mis antecesores fueron legionarios, fieles sirvientes a la causa peruana, y la única forma de lograr eso es a través de la rectitud y la obligación de todos sus ciudadanos a colaborar con esto
• -       ¿Colaborar? ¿Desde cuando ser obligado a ser algo que no quiere hacer es colaborar? Tu visión está muy errónea, todos tenemos derecho a la libertad
• -       ¿Acaso libertad es matar a cualquiera por un estúpido celular? ¿Acaso libertad es ser corrupto? ¿Acaso libertad es huir del país con este se encuentra en crisis? – movió su espada de lado a lado – no amigo Borgues, eso se le llama miedo, temor, una libertad a la que te refieres no tiene bases en este país. ¡El miedo es la nueva libertad del mundo!
• -       Entonces tendré que respetar tu opinión, pero si te atreves a imponer eso sobre otras personas, entonces ya no es libertad, eso es opresión
• -       Una opresión necesaria, una libertad necesaria, una visión nueva de la libertad peruana ¡Eso es lo que queremos!
• -       No me dejas de otra, tendré que pelear
• -       ¿Pelear? – se echó a reír – a ver si puedes
• -       No me gusta para nada pelear con chicas, pero cuando alguien aplasta los ideales de otros, tengo que ponerme serio – todavía temblaba
• -       ¡A PELEAR NIÑO COBARDE! ¡LEGIÓN DEL CÓNDOR!

Al decir estas palabras, la chica llamada Noelia fue envuelta en un vórtice de fuego tan colorido que mis ojos apenas podían apreciar tal deslumbre de naranjas, rojos y amarillos juntos en un mismo lugar. El remolino creció consumiendo todas las plantas del lugar, quemándolas en su camino, el remolino cesó y una figura negra apareció de entre las llamas que latían cada vez más.

• -       Esta es mi nueva forma de batalla, la he llamado “Cóndor en Llamas” – su traje de capitana especial fue quemado para aparecer en su lugar un traje de colores naranjas oscuros y rojos candentes, siempre envuelta en un fuego que parecía infinito
• -       ¿Pero que? ¿Qué ha pasado?
• -       Esta es mi transformación, al igual que tus amigos tienen algo parecido cuando recuperan su poder total, yo pude obtener este poder al tener el ferviente deseo de superación siempre marcado en mi frente. Tuve que asesinar a varias lacras callejeras para acceder a este magnífico poder. No te olvides que yo también tengo poderes incaicos, y ahora que lo he hecho, ¡El fuego que crece en mi es tan devastador que arrasará con quienes se interpongan en el camino de la legión del cóndor!
• -       Oh no…
• -       Muere…

Un gran corte apareció en segundos en mi pecho, quemaba, ardía demasiado, como si una espada la hubiese cortado con fuego hirviendo, realmente me dolía… ¿Este es su poder? ¡¿Qué voy a hacer?! ¡Tengo miedo!