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lunes, 23 de marzo de 2015

Ser diferente solo por creer en un mundo mejor


  • -          No sé quién seas, pero hasta ahora no has actuado para nada, o eres un miedoso, o eres el fortachón del grupo, viendo tu apariencia, parece que si
  • -          No actué por temor, pero ahora, hare que pidas disculpas!
  • -          ¿pedir disculpas?, eres muy formalito niño
  • -          Solo pide disculpas y no te haré daño, a pesar de que lo merezcas
  • -          ¿has visto todo lo que hecho?, si rompiste mis huesos de los dedos, es por simple cansancio, en realidad…

Antes de terminar de hablar, un golpe en el rostro causo un gran sonido en toda la cúpula, un sonido de dientes rompiéndose, como si fuese un cascanueces destrozando hasta la última semilla de la nuez. Este repentino golpe la envió al extremo derecho de la azotea, causando un rompimiento en la pared seguido del derrumbe de este pedazo. La protección y el cuarto blanco de la azotea desapareció, y todo volvió a su total oscuridad, solo iluminando a ambos contrincantes las luces de Lima.

 La mirada de Luis era desafiante, no mostraba la típica timidez, sino, una furia desencadenada por ver a sus amigos caer ante la reina de los muertos. Ella se levantó con algo de lentitud, tal golpe causo que su armadura se destrozara, salvo por la cabeza, que aún mantenía la calavera cubriendo su cabello oscuro.
  • -          Carajo… ese fue un buen golpe… hahaha – seguía riendo pero demasiado agitada
  • -          Este solo fue el segundo golpe, el tercero, será directo a tu corazón, si no pides disculpas ahora!
  • -          Hehehe si… hace un tiempo que no me divertía! – dijo con total entusiasmo

Su armadura volvió a recubrirle el cuerpo, pero pronuncio un nombre antes
  • -          Ahora te mostrare a todos mis amigos!, Yahuar…!
  • -          Basta Milady!
  • -          ¿eh?
  • -          ¿es… el señor Ariano?

El dueño de la empresa “El Porvenir Azul” apareció con un pijama de rayas, deteniendo con un grito esa palabra que Milady iba a decir.
  • -          Se terminó la pelea Milady, ahora ve a tu cuarto
  • -          Pero…!
  • -          Nada de peros!, destrozaste mi azotea, dejaste mal heridos a tus compañeros de equipo, y ahora querías usar tu poder especial en contra de un niño, vete a tu cuarto ahora!
  • -         
  • -          Y tu Luis… lo lamento, esta niña exagero en el entrenamiento básico, lo siento mucho
  • -          … ¿entrenamiento básico? – pregunto Luis totalmente desorientado, pero calmado
  • -          Ayúdame a llevar a tus amigos a la enfermería, te explicare todo en la sala de estar del piso 30. Ya llame a sus padres, les dije que estarían en una investigación marketera que durara toda la noche, así que no habrá que preocuparse
  • -          Ayudare a mis amigos, pero, ¿le puedo hacer una pregunta?
  • -          Ah… claro dime – mientras tomaba entre sus brazos a Sylvana
  • -          ¿Por qué nosotros?, ¿Por qué somos especiales?, ¿Qué somos?... ¿somos súper héroes?... o… ¿monstruos?
  • -          Mmm – pensó por unos breves segundos - ¿tú que crees que son?
  • -          Con lo que ha pasado, lo que hemos visto… creo que somos, una diferencia
  • -          Por eso no son ni héroes ni monstruos, son chicos con poderes que desean ayudar a quien lo requiera
  • -          Aun no entiendo la respuesta… ¿Qué somos?
  • -          Yo tampoco entiendo tu pregunta, te respondí el fin, pero ustedes, deben averiguar que son, ya no son jóvenes hablando por la computadora o jugando juegos en red, ahora son… diferentes
  • -          ¿esa diferencia es buena o mala?
  • -          Lo bueno y lo malo no existe, solo son palabras para los actos que hacemos, y, sus actos, pueden ser calificados como buenos, pero, al final, sus actos finales definen si esa persona es, “buena o mala”
  • -          Está bien…
  • -          Tranquilo Luis, les ayudaremos a encontrar a esa respuesta
  • -          ¿y que paso con Jerouu?
  • -          Ni idea… debe de estar en su casa durmiendo, ya hablare con el
  • -          Bien…

No entendí lo que me quería decir, tal vez es demasiado difícil tratar de explicar la respuesta con simples palabras, o quizás… ni el sabia la respuesta a lo que éramos, pero al final, solo me dejo una duda… ¿Por qué nosotros tenemos estos poderes y no otros?

En el cerro San Cristóbal
  • -          ¿QUE QUIERE DECIR CON SUBIR Y BAJAR EN DOS MINUTOS? – grite conmocionado al saber este nuevo reto
  • -          Como lo oíste niño, solo tendrás dos minutos, son las seis de la mañana, y para tu suerte, tu abuelo me dijo, que fuese más… comprensible, por eso, te daré todo este día para que lo hagas
  • -          No, no, claro que no! – me negué rotundamente
  • -          Entonces seguirás siendo un inútil
  • -          No, carajo… tengo clases en la noche!
  • -          Entonces date prisa en subir y bajar, hazlo en dos minutos y te dejare libre hasta el viernes
  • -          Pero… ¿no pueden ser más?!, digo, solo en subir, corriendo, me demorare como 10 minutos!
  • -          Está bien… te daré esos diez minutos, y no más…
  • -          Espera… no, no!, era broma
  • -          Yo esperare sentado, dudo que me dejen subir con mi olor natural…
  • -          A todo esto… ¿Cómo me ayudan estos dos supuestos entrenamientos a mejorar mi nivel de fuerza?
  • -          Nunca dije que hacer eso te daría músculos niño, te lo explicare al momento de bajar del cerro
  • -          Siempre hay misterio… - dije con total resignación 
  • -          Si no hay misterio, no habría trama en esta historia niño

-          Como sea…

El reto está hecho, ahora tengo que subir el cerro con mayor altura de todo Lima… y en solo 10 minutos, debo estar donde comencé, ¿Cómo lo hare?, ni idea… pero, nadie me reta sin saber que yo siempre gano!, y esta no será la excepción.

Comencé trotando hasta la mitad del cerro, donde pude ver pequeñas casas de adobe alrededor, niños jugando en la pista, postes de luz y una tranquilidad en el ambiente, no la típica bulla del Rímac con salsa y reggaetón, sino, un ambiente de niños jugando, y claro, los buses y micros que hacían el recorrido hasta la gran cruz.

Cuando seguía corriendo, en la mitad, ya no pude seguir, realmente estaba cansado, aun con los moretones en las piernas, se me hace difícil seguir subiendo, pero, si me rindo ahora, seré un completo inútil, no solo esta misión de ayudar al mundo, sino… en todo! Soy un fracasado en el trabajo, que ya no tengo, en los estudios… y en el amor, si fallo en esto, ¿para qué vivir?, ¿para que luchar?, no, no puedo rendirme en esto, no puedo seguir fallando, no puedo seguir FALLANDO!

Y con fuerzas dentro de mí y una esperanza que me da fuerzas, seguí subiendo y con mucha rapidez, aun con el cansancio y el dolor en mis pies, en todo mi cuerpo, seguí subiendo, con el dolor en la cabeza y en el interior, seguí subiendo, con el fracaso persiguiéndome, seguí subiendo.

La ciudad se alejaba, pero no, yo era el que se alejaba de la ciudad, ya no falta mucho, ya no falta nada… ya no falta nada! Grite con emoción al llegar a la cima, con total alegría llegue a la cima, y a pie!, vi la gran cruz y el sol asomándose por la mañana, una mañana de gloria!, una mañana diferente!, el sol, ahora lo veo sobre mi Lima… ahora… ¿Cómo bajo sin ir por el mismo lugar y rápido? Mierda!




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